Estos días hemos estado muy entretenidos haciendo esta casita. Ha sido un trabajo en equipo, divertido, de esos que sólo se pueden hacer en vacaciones y que hacen que la casa se convierta en una locura por unos días.
David se encargó de la estructura, cortar listones y atornillar, David pequeño fue mi pintor favorito, él hizo el dibujo de la mascota y por su puesto nos invitaba cada ratito a infusiones de plastilina y garbanzos y nos avisaba de qué cosas nos faltaban por hacer. Yo ayudé en el montaje y coloreé los dibujines, y éste es el resultado.
Utilizamos como materiales baldas de madera y listones para la estructura, el tejado es un somier de Ikea y su soporte un par de borriquetas. ¿Alguien se anima?